Que Es La Idolatría Según La Biblia?
Felipe Aguirre
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(F-2) La idolatría es la adoración de dioses falsos que puede, o no, incluir la creación de imágenes o ídolos – Los dos primeros mandamientos dados en el Decálogo (los Diez Mandamientos) prohibían el pecado de la idolatría. Así el Señor se refirió al error y al pecado de tener dioses falsos, tangibles o intangibles, como objetos de adoración.
(Este mandamiento no se refiere a los decorados usados en los templos, tabernáculos o capillas. El mismo Señor que dio los Diez Mandamientos también instruyó a los israelitas en cuanto a la decoración del arca del pacto con querubines. El hecho de tener estos querubines allí como objetos artísticos no se consideraba idolatría.
La fabricación y el empleo de una imagen u objeto se torna idolatría cuando se hace como parte integral de la adoración y reverencia de los individuos.) Es muy importante entender que la adoración de un dios falso e intangible es tan perniciosa para el idólatra como lo es adorar a una imagen tangible.
- Algunos dioses falsos pueden asociarse con las fuerzas de la naturaleza, o con la adoración de la naturaleza misma, por ejemplo, las leyes naturales o poderes que se ven manifestados en ella.
- La idolatría manifestada hacia la naturaleza ha incluido la adoración de distintos animales, plantas, condiciones del tiempo, volcanes, el sol, la luna, las estrellas, los planetas, etc.
Por ejemplo, el Baal del Antiguo Testamento era un dios tomado de la naturaleza. Se le asociaba con la lluvia y la fertilidad del suelo y también era adorado como el dios sol. Los mitos que lo rodeaban establecían que era un personaje real, que vivía en una montaña del norte de Israel, y participaba en toda suerte de empresas heroicas pero pecaminosas.
- Se suponía que había sido muerto por Mot, el dios de la muerte, y que posteriormente había resucitado.
- Este episodio explicaba la gran sequía ocurrida en el Medio Oriente y también el fin de esa sequía (Roth, Encyclopedia Judaica, s.v., ‘Baal worship’, 4:10-11).
- Aunque en el Antiguo Testamento la idolatría está asociada con la adoración de ídolos, la verdadera idolatría es mucho más que la práctica de inclinarse ante imágenes y de apaciguar a los ídolos.
El Señor ha declarado en todas las épocas que siempre que los hombres ponen su confianza en otros hombres, naciones, tratados, tesoros, minerales preciosos, ejércitos o armamentos, sus hechos son una forma de idolatría porque revelan falta de confianza en Jehová.
¿Qué es el pecado de la idolatría?
La idolatría ha sido el concepto utilizado por la Iglesia para reconocer que existen distintas formas de acercarse a Dios, pero que, según el discurso cristiano, fueron, son y serán falsas. El concepto es polisémico, y se refiere tanto a una definición teológica, como a una demonológica y a una jurídica.
¿Qué dice la Biblia de las imágenes e ídolos?
Deuteronomio 5:8-9 »No te harás ídolos, no adorarás imágenes; sean de hombre o mujer, de aves, de animales o de peces. No te inclinarás delante de imagen alguna para adorarla de ninguna forma, porque yo, el SEÑOR tu Dio | Nueva Biblia Viva (NBV) | Descargue La Biblia App ahora Lea la Biblia, descubra Planes y busque a Dios todos los días. : Deuteronomio 5:8-9 »No te harás ídolos, no adorarás imágenes; sean de hombre o mujer, de aves, de animales o de peces. No te inclinarás delante de imagen alguna para adorarla de ninguna forma, porque yo, el SEÑOR tu Dio | Nueva Biblia Viva (NBV) | Descargue La Biblia App ahora
¿Cómo castiga Dios la idolatría?
(F-4) El pecado de la idolatría – ‘La idolatría era la ofensa más repugnante contra la ley mosaica, la cual es sumamente particular en definir los actos que constituyen ese delito, y muy severa en la imposición del castigo. Así, se prohibía hacer cualquier imagen de un dios ajeno; postrarse ante tal imagen o ante los objetos naturales que eran adorados sin imágenes tales como el sol y la luna (Deuteronomio 4:19); permitir que hubiera altares, imágenes, santuarios o ídolos (Exodo 34:13); o conservar el oro o plata procedentes de los ídolos y permitir que tales metales entraran en las casas del pueblo de Israel (Deuteronomio 7:25-26); sacrificar para los ídolos, particularmente cuando se trataba de sacrificios humanos; comer de las víctimas que otros ofrecían a los ídolos; profetizar en el nombre de un dios ajeno; y adoptar cualquiera de los ritos idólatras para emplearlos en la adoración del Señor (Deuteronomio).
¿Dónde empieza la idolatría en la Biblia?
Teología Bíblica – Clase 9: La Historia de la Idolatría
- Clase esencial Teología Bíblica Clase 9: La Historia de la Idolatría
- Introducción
La idolatría encuentra la mentalidad moderna como algo extraño o totalmente incomprensible. Tendemos a asociarlo con religiones antiguas y cultos. Historias y mitologías. Pero la realidad de la idolatría no está muy lejos de ser removida de nuestra cultura.
Tim Keller expresa: «nuestra sociedad contemporánea no es fundamentalmente diferente de las antiguas. Cada cultura está dominada por su propio grupo de ídolos. Cada una tiene sus «sacerdocios,» sus símbolos y rituales. Cada una tienes sus altares—ya sea torres de oficinas, spas, gimnasios, estudios o estadios—donde deben ser llevados a cabo los sacrificios para procurar las bendiciones de la buena vida y evitar el desastre.
¿Qué son los dioses de la belleza, el poder, el dinero y el éxito sino las mismas cosas que han asumido proporciones míticas en nuestra vida y en nuestra sociedad? Podemos no doblar nuestras rodillas físicamente ante la estatua de Afrodita, pero muchas mujeres jóvenes son llevadas a la depresión y desórdenes alimenticios debido a una preocupación obsesiva por la imagen de su cuerpo.
Podemos no necesariamente quemar incienso a Artemisa pero cuando el dinero y la profesión son llevadas a proporciones cósmicas, llevamos a cabo un tipo de sacrificio de niños, descuidando la familia y la comunidad para alcanzar un lugar más alto en los negocios y adquirir más prosperidad y prestigio.» (dioses falsos, Pág.
xiv) Pero no hay dioses que representen estas cosas; solo existe un Dios verdadero, el Padre Todopoderoso, creador del cielo y la tierra y de todas las cosas visibles e invisibles. Solo Él es el verdadero Dios a quien debe darse alabanza y adoración por la humanidad.
- Pero la humanidad no lo adora totalmente.
- La historia de la Biblia tiene mucho que decir acerca de la adoración a Dios y la adoración extraviada o idolatría.
- Por eso es que quiero ser muy claro acerca de lo que quiero decir con idolatría.
- Idolatría es adorar cualquier otra cosa antes que Dios, sea visible o invisible.
Esto significa que la idolatría puede ser externa o interna. Keller lo expresa de la siguiente manera: «un ídolo es cualquier cosa que observas y dices en lo más profundo de tu corazón, ‘si tengo eso entonces sentiré que mi vida tiene significado y sabré que tengo valor, luego me sentiré significativo y seguro.» (CG, Pág.
- Por tanto, observemos la historia de la idolatría y luego al final detallaremos un poco lo que esto significa para nosotros.
- El juicio de Isaías (Isaías 6-13)
- Toma una Biblia y ve conmigo a un pasaje muy conocido de las profecías de Isaías, Isaías 6.
- Este no es el comienzo de la historia pero es como el eje por el cual miramos hacia atrás y hacia adelante en la historia de la idolatría.
- Leamos un par de versículos juntos.
«Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí.
- 9 Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis,
- 10 Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad.
- 11 Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto;
- 12 hasta que Jehová haya echado lejos a los hombres, y multiplicado los lugares abandonados en medio de la tierra.
- 13 Y si quedare aún en ella la décima parte, ésta volverá a ser destruida; pero como el roble y la encina, que al ser cortados aún queda el tronco, así será el tronco, la simiente santa.» (Isaías 6:8-13)
Isaías está siendo encomendado a pronunciar juicio a Israel. ¿Por qué juicio? Debido a su idolatría. La idolatría es uno de los mayores pecados de Israel descritos en Isaías 1-5 (por ejemplo, 2:8; 2:18-19; 2:20). Luego en el capítulo 6, está el primer par de versículos en que vemos esta famosa alabanza por la santidad de Dios.
- Versículos 1-4); después Isaías es declarado como perdonado por Dios (versículos 5-7); luego Isaías es encomendado para ensordecer y cegar a Israel hacia la Palabra de Dios (versículos 8-10); y finalmente los efectos de este juicio (versículos 11-13).
- Somos dejados preguntándonos porque Dios le pidió a Isaías que hiciera esto.
Por qué le hizo proclamar un mensaje que endurecería sus corazones. Verdaderamente, esto es difícil de entender. Pero la clave para entender esto es fijarse donde nos encontramos en la historia bíblica. Israel ha pecado y pecado y pecado y pecado y finalmente Dios estaba pronunciando un veredicto de «culpabilidad» sobre la nación.
- Sabemos que Dios es perfectamente santo.
- Y sabemos que ahora Él está juzgando a Israel por su pecado de la idolatría.
- Sí, pero la idolatría no es mencionada.
- Sí, pero el concepto está allí.
- Observa el lenguaje utilizado: Isaías debe predicarle al pueblo que deben mantenerse escuchando pero no entendiendo.
Deben mantenerse viendo pero no percibiendo. Este lenguaje no es nuevo, ser «ciego y sordo» tiene que ver con la adoración de ídolos a lo largo de la Escritura. Isaías es muy específico en el capítulo 42: « 17 Serán vueltos atrás y en extremo confundidos los que confían en ídolos, y dicen a las imágenes de fundición: Vosotros sois nuestros dioses,18 Sordos, oíd, y vosotros, ciegos, mirad para ver.19 ¿Quién es ciego, sino mi siervo? ¿Quién es sordo, como mi mensajero que envié? ¿Quién es ciego como mi escogido, y ciego como el siervo de Jehová, 20 que ve muchas cosas y no advierte, que abre los oídos y no oye?» (Isaías 42:17-20) O Isaías 43:8, 10: «Sacad al pueblo ciego que tiene ojos, y a los sordos que tienen oídos antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí.» O Isaías 44:8-19: « No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antig:uedad, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos.
- No hay Dios sino yo.
- No hay Fuerte; no conozco ninguno.9 Los formadores de imágenes de talla, todos ellos son vanidad, y lo más precioso de ellos para nada es útil; y ellos mismos son testigos para su confusión, de que los ídolos no ven ni entienden.10 ¿Quién formó un dios, o quién fundió una imagen que para nada es de provecho? 11 He aquí que todos los suyos serán avergonzados, porque los artífices mismos son hombres.
Todos ellos se juntarán, se presentarán, se asombrarán, y serán avergonzados a una.
- 12 El herrero toma la tenaza, trabaja en las ascuas, le da forma con los martillos, y trabaja en ello con la fuerza de su brazo; luego tiene hambre, y le faltan las fuerzas; no bebe agua, y se desmaya.
- 13 El carpintero tiende la regla, lo señala con almagre, lo labra con los cepillos, le da figura con el compás, lo hace en forma de varón, a semejanza de hombre hermoso, para tenerlo en casa.
- 14 Corta cedros, y toma ciprés y encina, que crecen entre los árboles del bosque; planta pino, que se críe con la lluvia.
- 15 De él se sirve luego el hombre para quemar, y toma de ellos para calentarse; enciende también el horno, y cuece panes; hace además un dios, y lo adora; fabrica un ídolo, y se arrodilla delante de él.
16 Parte del leño quema en el fuego; con parte de él come carne, prepara un asado, y se sacia; después se calienta, y dice: !!Oh! me he calentado, he visto el fuego; 17 y hace del sobrante un dios, un ídolo suyo; se postra delante de él, lo adora, y le ruega diciendo: Líbrame, porque mi dios eres tú.18 No saben ni entienden; porque cerrados están sus ojos para no ver, y su corazón para no entender,19 No discurre para consigo, no tiene sentido ni entendimiento para decir : Parte de esto quemé en el fuego, y sobre sus brasas cocí pan, asé carne, y la comí.
- ¿Haré del resto de él una abominación? ¿Me postraré delante de un tronco de árbol?» (Isaías 44:8-19) Isaías está aclarando un punto importante de la historia: los adoradores de ídolos no tienen ojos espirituales, aunque tienen ojos físicos.
- Aunque tienen oídos físicos, no tienen oídos espirituales,
- ¿Por qué sucede esto? Observa el Salmo 115 (ver Salmo 135:15-18).
« Los ídolos de ellos son plata y oro, obra de manos de hombres.5 Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, mas no ven; 6 Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen; 7 Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta.8 Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.» (Salmo 115:4-8) Un se está desarrollando un principio importante en la historia: si adoramos ídolos nos convertiremos en lo mismo que los ídolos y su semejanza nos arruinará.
Esto es lo que Isaías debe proclamarle a Israel: «Israel, a ti te gusta adorar ídolos en lugar de al único, verdadero y santo Dios. Está bien. Tu juicio es que te convertiré en algo espiritualmente inanimado, insensible y sin vida como los ídolos que adoras. Tendrás ojos pero no verás. Tendrás oídos pero no escucharás.» Greg Beale: «Así en el versículo 9 y a través de Isaías, Dios le ordena al pueblo idólatra que sea igual a los ídolos que han rehusado dejar de amar.
En el versículo 10, Él le ordena a Isaías hacer que el pueblo sea igual que sus ídolos a través de su predicación profética. Este es un ejemplo importante del concepto de lex talionis (ley del talión) del Antiguo Testamento—ojo por ojo. Las personas son castigadas por medio de su propio pecado.» (Beale, Pág.47) Sin embargo, este no es el inicio de la historia.
- Nos hemos desplomados justo en medio.
- Retrocedamos la película del juego un poco para ver cómo llegamos aquí.
- Eso significa ir hacia el primer mayor evento de adoración de ídolos en la vida de Israel.
- ¿Puede alguien decirme cuál fue? El becerro de oro – Éxodo 32 El juicio de Dios sobre Israel a través del profeta Isaías no llegó inesperadamente.
Como mencioné anteriormente, hubo décadas de idolatría por parte del pueblo y sus líderes que dieron lugar a esto. De hecho, al principio de la historia del pueblo de Dios la idolatría sucedió muy rápidamente. Israel es liberado de su esclavitud en Egipto.
Los capítulos 1-14 hablan de este gran evento de salvación. En los capítulos 19-20, Dios establece para Israel lo que significa para ellos ser su pueblo. Ellos deben reflejarle al mundo su gloria y quien es Él. Para hacer esto más claro, Él les otorga leyes y las dos primeras expresan que solo Él es el Dios que debe ser adorado.
¿Por qué? Porque Él los salvó. Luego, para aclararle a su pueblo la manera como debían adorarlo Él dice que no deben hacer imágenes o estatuas o cualquier otra cosa. No pasa mucho tiempo antes de que se involucren en lo mismo que Dios prohibió. Al parecer, ellos pensaron que estaban adorando a YHWH honestamente pero estaban adorándolo de la manera en que lo veían.
- Ellos crearon un ídolo o imagen a su gusto y deseos.
- ¿Y qué sucedió? Israel fue descrito conforme a lo que adoraban.
- Dios los llama pueblo de dura cerviz (Éxodo 32:9; 33:3, 5; 34:9; Deuteronomio 9:6, 13; 10:16; 31:27).
- Esta es una frase extraña, pero tiene un significado muy irónico.
- Duro de cerviz es una frase utilizada para describir a Israel, es interpretada sarcásticamente como rebelde porque ellos estaban adorando un becerro y por eso se volvieron igual que él.
Así como una vaca terca que rehúsa ir en la dirección correcta, el Israel idólatra es «duro de cerviz.» Notas de Beale: «la primera generación de israelitas no se convirtió literalmente en becerros de oro como el becerro de oro que ellos adoraron, pero son descritos como actuando fuera de control y becerros obstinados porque aparentemente son ridiculizados por haberse identificado con la imagen de rebelión espiritual del becerro que habían adorado.
Habían llegado a parecerse a lo que ellos habían reverenciado y ese parecido estaba destruyéndolos.» (Beale, Pág.82). Por tanto, comenzamos nuestra historia con un profeta del Israel posterior que estaba pronunciando juicio sobre el pueblo por su idolatría. Él dice que ellos tienen oídos pero no oyen, ojos pero no ven.
Ellos se habían vuelto como el ídolo que adoraban. Pero cuando regresamos al evento crucial de la primera generación de Israel en el Éxodo, también vemos la tendencia. El pueblo reverenció a un becerro de oro y se convirtieron en un pueblo de dura cerviz.
- Como sabemos y hemos visto en clases de otro tema, la historia de Israel no avanzó bien en este punto.
- La idolatría sería una gran lucha para la nación mientras caminaban hacia la tierra y se relacionaban con las naciones de los alrededores.
- Sus reyes posteriores serían juzgados por la manera como adoraban a Dios.
¿Es que la nación reflejaba a Dios y su gloria correctamente cuando lo adoraban de la forma que fue ordenada, libre de «imágenes de animales»? No. Salmo 106:19-20: «Hicieron becerro en Horeb, se postraron ante una imagen de fundición.20 Así cambiaron su gloria por la imagen de un buey que come hierba,» 2 Reyes 17:14-15: « 14 Mas ellos no obedecieron, antes endurecieron su cerviz, como la cerviz de sus padres, los cuales no creyeron en Jehová su Dios.15 Y desecharon sus estatutos, y el pacto que él había hecho con sus padres, y los testimonios que él había prescrito a ellos; y siguieron la vanidad, y se hicieron vanos, y fueron en pos de las naciones que estaban alrededor de ellos, de las cuales Jehová les había mandado que no hiciesen a la manera de ellas.» (ver 1 Reyes 12:25-33) Oseas 4:7 « 7 Conforme a su grandeza, así pecaron contra mí; también yo cambiaré su honra en afrenta,» (ver Oseas 4:16-17) Jeremías 2:5, 11: « 5 Así dijo Jehová: ¿Qué maldad hallaron en mí vuestros padres, que se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad y se hicieron vanos? 11 ¿Acaso alguna nación ha cambiado sus dioses, aunque ellos no son dioses? Sin embargo, mi pueblo ha trocado su gloria por lo que no aprovecha,» Este evento definiría la existencia de Israel.
- Cuando Israel comenzó a adorar ídolos se convirtió en un pueblo testarudo, vacío y vano y sin vida al igual que los ídolos que adoraban.
- Y esta fue su ruina.
- Sin embargo, lo que sucedió con este becerro de oro no es el inicio de la historia.
- Antes de avanzar, vayamos al inicio.
- Creados para reflejar (Génesis 1-2) No voy a repasar mucho aquí porque hemos visto esto una y otra vez en historia anteriores.
La humanidad fue creada como seres que piensan. Dios nos creó a su imagen y semejanza para gobernar como vice regente sobre su creación y multiplicarnos con el fin de expandir la imagen divina por toda la tierra. Humanidad significa que fuimos creados para reflejar su carácter, sus atributos y su gloria.
Eso quiere decir que nuestra humanidad se encuentra encerrada en quien es Dios. Ser humano es adorarlo, o dicho de otra manera, ser humano es reflejar su gloria y su imagen. «Todos los humanos han sido creados para ser seres que reflejan y por ello reflejarán cualquier cosa con la que se encuentren comprometidos, ya sea el verdadero Dios o algún objeto del orden creado.» (Beale, Pág.22).
En lugar de obedecer el mandato de Dios de Génesis 1:27 para llevar la gloria de Dios hasta los confines de la tierra, Adán escogió expandir su propia gloria (ver Ezequiel 28). Él se comprometió con la auto-adoración. El pecado de Adán en el jardín del Edén en el fondo estaba relacionado con la idolatría, es decir, Adán se comprometió con algo diferente a Dios: «Cuando Adán dejó de estar comprometido con Dios y reflejar su imagen, él reverenció algo diferente en lugar de Dios y reflejaba este nuevo objeto de adoración.
Sin embargo, en el corazón del pecado de Adán estaba volverse de Dios y reemplazar la reverencia a Dios con el nuevo objeto de reverencia al cual Adán ser había conformado.» (Beale, Pág.127) Debido a que se convirtió en un idólatra, Adán no pudo cumplir su misión divina y tener autoridad para gobernar y sojuzgar la creación: «como portador de imagen Adán debía reflejar el carácter de Dios, lo cual incluía reflejar la gloria divina.
Así como el hijo de Adán era a ‘imagen’ y ‘semejanza’ de Adán (Génesis 5:1-3) y debía reflejar a su padre humano en apariencia y carácter, Adán era un hijo de Dios que debía reflejar la imagen de su Padre. Esto significa que el mandato de Adán para sojuzgar, gobernar y llenar la tierra incluye principalmente el hecho de que él es un rey que llena la tierra no solo con descendencia sino con una descendencia portadora de imagen que reflejará la gloria de Dios.» (Beale, Pág.131) Y así tenemos esta idea en el inicio una vez más, de que reflejas lo que reverencias y eso te llevará a tu ruina o restauración.
Adán fue arruinado por su adoración. Israel es arruinado por su adoración. Cerrando la brecha En el inicio destaqué el hecho de que la mayoría de las personas no se inclinan a ídolos físicos y lo adoran hoy en día, y mientras cubrimos la brecha del Antiguo Testamento al Nuevo Testamento lo que vemos es también una brecha.
Ciertamente, aun hay adoración de ídolos pero está tomando un nuevo significado. En cada uno de los evangelios (Mateo 13:13-15; Marcos 4:12; Lucas 8:10; Juan 12:39-40), Jesús cita a Isaías 6:9, 10. Al hacerlo, él al igual que Isaías está pronunciando un juicio sobre el Israel de su tiempo.
- Ahora, el Israel del tiempo de Jesús no doblaba sus rodillas a los becerros de oro sino a sus tradiciones.
- Este era el objeto de su adoración.
- Alerta de herramienta: la tipología nos ayuda a entender esto mejor.
- La incredulidad y el juicio de Israel en los días de Isaías era el anuncio de un modelo que anticipó una mayor incredulidad y juicio en los días de Jesús.
El modelo se estaba repitiendo pero lo que está en juego es mucho mayor. En el tiempo de Jesús, los israelitas estaban rechazando la Palabra de Dios en la carne al igual que luego Israel estaba convirtiéndose en lo que adoraba, testarudos y sin vida espiritual; teniendo ojos pero no viendo y oídos pero no escuchando.
- Lo mismo estaba sucediendo ahora.
- Se estaban volviendo tan muertos espiritualmente como sus tradiciones y rituales humanas.
- Su tradición era ficticia.
- Recuerda estas palabras de Jesús: « 27 !!Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia.28 Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad.» (Mateo 23:27-28) Se habían convertido en lo que adoraban para su ruina.
Y cometieron el acto supremo de falsa adoración al dios falso de las tradiciones humanas al matar al Dios-hombre Jesús. Al reverenciar sus ídolos, mataron la «imagen del Dios invisible.» (Colosenses 1:15) No hay neutralidad en tu adoración a Dios. O lo reverencias o no lo haces.
- Tu lo reflejas a Él y su gloria, o lo «cambias» por algo que Él creó.
- La pregunta que necesitas hacer es ¿cómo estás adorando? Beale: «Todos nosotros somos imitadores o estamos siendo conformados como un ídolo o como Dios.
- Algunos pueden pensar que es posible existir en una modalidad de neutralidad espiritual en su vida cristiana.
Algunos cristianos piensan que pueden pasar largos períodos de tiempo sin leer su Biblia u orar o asistir a la iglesia y tener compañerismo con otros creyentes. Cuando el pueblo de Dios piensa y actúa de esta manera, en realidad se vuelven sutilmente conformes a este mundo en lugar de Dios.» Por eso la exhortación de Pablo en 1 Corintios 4 y 1 Corintios 11 para imitarlo a él como él imita a Cristo es importante.
¿Cuál fue la primera idolatría en la Biblia?
2 – La prohibición de imágenes de Yavé – El primer Mandamiento saca una conclusión concreta que dice así: «No te hagas estatua ni imagen alguna de lo que hay arriba, en el cielo, abajo, en la tierra, y en las aguas debajo de la tierra. No te postres ante esos dioses, ni le des culto, porque Yo, Yavé, tu Dios, soy un Dios celoso» (Ex 20,4s).
- El Deuteronomio lo repite de forma casi idéntica (5,8s).
- Según los especialistas actuales en Biblia lo que aquí se prohibe hacer y venerar son las imágenes de Yavé, y no imágenes de otros dioses, como en otro tiempo se pensó.
- La idolatría tiene en el Antiguo Testamento dos sentidos diferentes: uno que se puede dar en el culto al Dios verdadero y otro que se refiere al culto a los demás dioses.
De este segundo hablaremos a través de los capítulos siguientes. Ahora nos ocupamos de la idolatría ligada al problema de las imágenes cultuales de Yavé; es el caso de los «ídolos yavistas». Las pocas ocasiones en las que se habla en el Antiguo Testamento sobre el problema de ídolos en el culto a Yavé tienen un gran peso en la tradición bíblica.
- Los principales casos son el del becerro de oro del Sinaí (Ex 32) y el de los becerros que puso Jeroboán en Dan y Betel (1 Re 12,26-33).
- Quizás se refieren al mismo problema los textos de Jueces 8,22-27 (el efod de Gedeón) y Jueces 17-18 (el ídolo de Micá).
- Estudiaremos un poco los dos primeros casos.a.
El becerro de oro (Ex 32) El capítulo 32 del Exodo es un punto de referencia constante en toda la Biblia. En el momento en el que ocurre el hecho se trataba de un pueblo recién liberado de la esclavitud, que se ve sometido a duras pruebas en ese periodo de transición, camino de la tierra que se les ha prometido.
- Su líder, Moisés, llevaba ya bastantes días lejos de ellos, recibiendo de Dios en el Sinaí las tablas de la ley.
- Entonces el pueblo, desorientado y añorando la tranquilidad pasiva de la esclavitud, le piden a Aarón: «Fabrícanos un Dios que nos lleve adelante, ya que no sabemos qué ha sido de Moisés, el que nos sacó de Egipto» (Ex 32,1).
El becerro de oro no es presentado como «otro dios»; tampoco se pretende representar a Yavé con dicha estatua. Se trata solamente de construir la sede, el símbolo de la presencia de Yavé en medio de ellos. En este caso la idolatría no está en el hecho de querer como materializar a Dios.
El problema no está en que Dios sea invisible y el ídolo yavista sea visible; que Dios sea espiritual y el ídolo yavista material. La perversidad del ídolo aquí no está en su intento de materializar a Dios. De hecho, muchas veces Dios se manifiesta a través de mediaciones materiales y visibles. El problema está en que los israelitas, al aceptar construir el becerro de oro, quieren que Dios les libere del papel que desempeñaba Moisés.
Rechazan su liderazgo liberador y quieren que Dios ejerza directamente otro liderazgo de acuerdo a lo que ellos deseaban. En el rechazo de Moisés el pueblo está rechazando realizarse como pueblo en función de un proyecto concreto de liberación y de conquista de una tierra nueva, en la que poder vivir como hermanos.
- Al desconfiar de Moisés, están desconfiando de la posibilidad de llevar a la realidad el proyecto de Dios.
- Se da a la vez una crisis política y una crisis de fe.
- El pueblo quiere volver atrás y quiere forzar a Dios a que vaya delante de ellos, no hacia la tierra prometida, sino hacia la tierra de Egipto.
No quieren un Dios que los saque de la esclavitud, sino un Dios que viva con ellos en la esclavitud. Quieren un dios «consuelo en la opresión», y no un Dios que «libere de la esclavitud». En este rechazo del proyecto auténtico de liberación, deseando construir una falsa liberación apoyada en el culto alienante a un dios que sólo consuela, pero no libera, se da ciertamente un pecado contra el poder de Dios.
- El Dios revelado en la Biblia está siempre muy por encima de la debilidad y la incapacidad humana; es siempre el Dios que no acepta el miedo y la alienación del pueblo.
- El Dios que promete la liberación puede realizar esa liberación.
- Dudarlo es ya negarlo: negarlo a él; eso es idolatría.
- Rechazar el proyecto de Dios como no viable es un acto de idolatría.
No la idolatría referida a los dioses falsos, sino idolatría en el culto mismo al Dios verdadero. Dios es trascendente, no porque es invisible o espiritual, sino porque actúa más allá de toda posibilidad humana. El Dios trascendente es siempre el Dios de la esperanza contra toda esperanza.
El becerro de oro, en cambio, simboliza el pecado de la desesperación y la desconfianza de que no era viable lo que Dios había prometido, y el consiguiente rechazo de este proyecto. El becerro de oro es el símbolo del dios manipulado, hecho a la medida de los hombres sin esperanza.b. Los becerros de Jeroboán (1 Re 12, 26-33) En este texto se plantea el mismo problema de fondo.
A la muerte de Salomón las tribus del norte se separan de Jerusalén en acto de rebeldía contra la explotación violenta del mismo Salomón y sobre todo de las amenazas aún peores de su hijo Roboán: «Mi padre los trató duramente, pero yo los trataré peor.
- Mi padre los azotaba con látigos y yo pondré a las cuerdas ganchitos de hierro» (1 Re 12,11).
- Entonces Israel se independiza del sur, nombrando como rey a Jeroboán.
- Pero éste, para que su pueblo no volviera más al templo de Jerusalén, por el peligro político que ello encerraba, construyó dos templos, en Dan y en Siquén, y en ellos puso dos becerros de oro.
«Luego dijo al pueblo: Déjense de ir a Jerusalén para adorar. Aquí está tu Dios, Israel, el que te sacó de Egipto» (1 Re 12,28). Como en el caso del Exodo, lo que pretenden no es adorar a otros dioses, ni siquiera representar a Yavé, sino que se trata sólo de un símbolo de su presencia.
- El pecado está de nuevo en su falta de fe en el ser y el poder de Dios.
- Es un pecado contra la trascendencia de Dios: no piensan que con la ayuda de Dios sí es posible arreglar aquel grave conflicto.
- Jeroboán busca resolver aquí un problema político, intentando manipular a Dios.
- Y, como en el Exodo, el símbolo de este dios manipulado es el oro.
En vez de resolver responsablemente los problemas políticos que causa la opresión y consiguiente división del reino, utilizan un recurso religioso ineficaz. En vez de combatir la opresión de Roboán y así mantener la unidad de todo el pueblo, justifican la opresión y la división, manipulando la presencia de Yavé en medio de ellos; así legitiman su actitud pasiva.
Al huir del enfrentamiento liberador en contra de la opresión, de hecho caen en la idolatría, para justificar así la sumisión del pueblo ante una situación de injusticia y división. De hecho, están negando su fe en el Dios liberador, y, por consiguiente, lo están ofendiendo. El culto al Dios que los sacó de Egipto exigía al pueblo enfrentarse a la opresión de Roboán.
En vez de este enfrentamiento, el pueblo prefiere una transformación idolátrica del culto. La idolatría transforma el Dios trascendente en un dios cautivo del sistema político, y por consiguiente legitimador de situaciones que el hombre sin esperanza declara imposibles de cambiar.
- En los capítulos siguientes del primer libro de los Reyes se puede constatar cómo esta actitud idolátrica llevó al pueblo a su propia destrucción.
- Es posible que el texto del Exodo visto en el apartado anterior sea una redacción elohista y por consiguiente estuviera escrito después de la construcción de los becerros de oro por Jeroboán I.
Para inmunizar al pueblo contra estos excesos los redactores Elohísta pudieron quizás, a partir de una tradición muy antigua, retrotraer el tema de los «becerros de oro» hasta el escenario mismo del Sinaí, para desde allí lanzar una seria admonición contra Dan y Betel.
El Dios que en el Sinaí se decidió por el exterminio de todos los que le quisieron dar un culto idolátrico, hará lo mismo con los israelitas que quieren volver a repetir lo mismo en estos santuarios.c. La prohibición de toda imagen de Yavé Las dos experiencias de los becerros de oro quedaron profundamente grabadas en la memoria del Pueblo de Dios y sobre ellas se desarrolló toda una teología liberadora antiidolátrica.
Los «ídolos yavistas» fueron drásticamente prohibidos. Y para evitar todo riesgo de idolatría se prohibió posteriormente el uso de todo tipo de imágenes en el culto a Yavé. Desde la época macabea, en contraste con el mundo helenístico circundante, la prohibición se interpretó cada vez más como prohibición radical de toda representación de cualquier ser viviente.
- El enfoque de fondo es dejar bien claro que a Dios no se le puede encerrar en una imagen; ni siquiera en una idea, ni en una institución.
- Todo cuanto podamos decir, pensar o representar sobre él no pasará de ser un mero balbuceo.
- Sólo se pueden presentar «aspectos» aproximados, ya que Dios siempre es mayor de lo que podemos pensar.
Es el Dios-siempre-más-grande, al que, por una parte, no es posible acabar de conocer, y por otra, cuanto más se avanza en su conocimiento, más sorprendente y estremecedor resulta y más se amplían los horizontes. La prohibición bíblica de las imágenes exige de los creyentes una elevada capacidad de crítica y purificación de toda imagen que nos hagamos de Dios, ya sea física o intelectual.
Todo el proceso de revelación bíblica es un continuo corregir y ampliar la imagen de Dios. Israel va entendiendo cada vez más a fondo que su Dios no es una condensación de las fuerzas de la naturaleza, sino que es Señor de esas fuerzas y es libre frente a ellas. Se vuelve hacia quien quiere volverse; y lo hace cuando, donde y como quiere hacerlo A Yavé no se le puede apresar de modo mágico en los estrechos límites de una imagen.
¿Qué es la idolatría de acuerdo a la Biblia?
Su trascendencia dinámica y su soberanía no tienen límites. El Deuteronomio recuerda a los israelitas que cuando Dios se reveló a sí mismo «ustedes oían el rumor de las palabras y no veían figura alguna; sólo oían una voz» (Dt 4,12). Con ello se quiere acentuar lo que estamos hablando de la trascendencia de Dios y al mismo tiempo su estrecha relación con el hombre, ya que la voz se mete muy hondo en el ser humano.
- La imagen no exige nada al hombre.
- La palabra, en cambio, es comunicación y exigencia.
- El Dios de la Biblia, percibido esencialmente como exigencia de justicia, deja de ser Dios en el momento en que, objetivado en una representación cualquiera, deja de interpelar.
- Dios interpela, exigiendo siempre más; el ídolo pide siempre menos: justifica cualquier tipo de medianía, injusticia o desamor.
Por ello la presencia de Dios se manifiesta principalmente a través de la Palabra; en cambio, las actitudes idolátricas se manifiestan especialmente a través de imágenes. Lo que se pretende, pues, con la prohibición de imágenes de Dios es cortar la tentación continua de querer achicar o manipular a Dios.
Para reflexionar y dialogar 1. Hay personas que hablan mucho de Dios cuando quieren ser elegidos para algún cargo, especialmente político, y hasta llegan a afirmar que van a gobernar en nombre de Dios. ¿No será eso una grave ofensa y una idolatría contra Dios y su pueblo? ¿Por qué? 2. Yavé prohibe que el hombre haga y adore cualquier imagen suya.
¿Por qué él quiere que sea así? 3. Antes los templos y capillas estaban llenas de imágenes con el propósito de hacernos recordar a Dios. Hoy generalmente ya no existen tantas imágenes en las iglesias. ¿Por qué? ¿Fue la fe del pueblo la que disminuyó o es que el pueblo se volvió más consciente? 4.
¿Qué es idolatrar a una persona?
Tr. Amar o admirar con exaltación a alguien o algo.